Debo admitir que me enteré que al primer mes del año se le conocía como «la cuesta de enero» cuando llegué a España. También debo confesar que el enero del 2021 ha sido uno de los más pesados de mi vida. Tanto así que tuve que hacer un viaje interno y salir al 100% de todo lo que era redes sociales, interacción con clientes, etc. Es decir, dejé de ser «eficiente» o «productiva» como dicen los libros. Claro que todo esto afecta las ventas de una empresa, al final, si no nos exponemos con publicidad, interacciones, follow ups, etc… pues claro, todo cae.
Ahora bien, parte de querer llevar una empresa un poco a lo Slow es querer trabajar de manera cíclica. Si bien, nuestras redes no deberían en teoría sufrir altos y bajos por mis estados de ánimo, yo considero muy humano exponerse y dejarse ver por lo que somos: A WORK IN PROGRESS.
Es que es tan paradójico para mi ver como por un lado queremos productos naturales, de cercanía, sin estandarizar y por favor: zero waste, pero a la vez queremos que todo siempre sepa igual, que tenga etiquetas increíbles, queremos promociones, descuentos, un 2×1, que se encuentre en superficies grandes y en todas las ciudades del país. Para mi, esto no es algo que va de la mano… al final, si queremos algo muy grande, tendremos que cortar camino y hacernos la vista gorda con muchas cosas y si queremos una empresa pequeña tenemos que asumir costes fijos y variables más altos y otro sin fin de cosas que para que contar 🙂
En fin, quería plasmar en nuestro MerakiVibes que cuando se está de buen humor, lo hacemos saber y que cuando no hay ganas de sonreir, pues también. Queremos ser una marca que crece por ciclos y no los que dice la economía, sino los que dice el cuerpo y la mente. Deseo con toda mi energía que después de que pasemos la pandemia entendamos que es mejor tener 100 empresas pequeñas que 1 gigante. No me malinterpretes… que yo admiro a muchas empresas grandes, pero cada vez más quiero darle mis ingresos a esa persona que se lo curra como nadie.
Cada vez más siento que Meraki puede dar mucho más que una botella de kombucha o de vegetales fermentados. Queremos ser parte de ese estilo de vida con el alma como protagonista y hoy vengo a darte las gracias por que en esa conocida cuesta de enero me diste el apoyo sin importar que meme o foto chula ponía en instagram.
A por un febrero lleno de aprendizaje, recargarnos a tope y en cuenta regresiva para dar abrazos de 3 minutos a los amigues.
Naya
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